Nuestro Salario Emocional son los beneficios emocionales o no económicos que obtenemos de nuestro trabajo y entorno laboral. Aunque en sí mismos no son emociones, estos beneficios sí que provocan en nosotros una respuesta emocional o un sentimiento.
Estas emociones o sentimientos repercuten en nuestro comportamiento y rendimiento en el trabajo. Por ejemplo, si considero que mi trabajo es apreciado y valorado por los demás, es más probable que yo me sienta motivada y comprometida, y mi rendimiento y comportamiento en el trabajo lo reflejarán.
En nuestra investigación hemos identificado 10 factores diferentes que constituyen el Salario Emocional: Autonomía, Pertenencia, Creatividad, Dirección (Visión Profesional), Disfrute, Inspiración, Maestría, Crecimiento Personal, Crecimiento Profesional y Propósito.
Algunos aspectos que son importante tener en cuenta al hablar del Salario Emocional:
- Nuestro Salario Emocional es subjetivo, por lo que el papel que desempeña cada uno de estos 10 factores depende de la importancia que le demos como individuos a cada uno de ellos. Por esta razón, es crucial tener una conciencia personal de cómo juegan estos 10 factores en nuestro trabajo.
- Nuestro Salario Emocional también es fluido y cambia con el tiempo en función de lo que ocurra en nuestra vida y en nuestro trabajo. Cambios como la salida de un compañero, un nuevo sistema o proceso, o un cambio de jefe pueden tener un impacto sustancial en nuestro Salario Emocional. Así que también es importante tener en cuenta una revisión periódica de nuestro Salario Emocional a lo largo del tiempo.
- Si sólo uno de los 10 factores del Salario Emocional se ve afectado negativamente, esto puede cambiar la forma en que nos sentimos con respecto a todo nuestro trabajo. Un solo factor puede impregnar el sentimiento general que tenemos hacia nuestro trabajo. Si percibimos que nos faltan oportunidades en varios de estos factores, entonces nuestra vida laboral puede sentirse miserable, es probable que nuestro rendimiento se vea afectado y que empecemos a desvincularnos de nuestro trabajo.
La buena noticia es que, al analizar y explorar el Salario Emocional de nuestros equipos, podemos identificar lo que tenemos que hacer para mejorar la motivación y el compromiso, y crear poco a poco organizaciones y equipos saludables, sostenibles y donde todas las personas puedan prosperar.
El Líder Como Figura Central para la Creación de Organizaciones Saludables
El centrarte en el Salario Emocional es beneficioso para ti como líder, tanto desde la perspectiva personal de tu propia realización, crecimiento profesional y desarrollo de la carrera, como desde la perspectiva de la mejora del Salario Emocional de tu equipo y organización.
Cuando se trata de tu equipo, la capacidad de inspirar, motivar y comprometer a las personas es una habilidad fundamental de liderazgo. Integrar prácticas para mejorar el Salario Emocional de tu equipo es una forma eficaz de aumentar la motivación y el compromiso de tu equipo. Dado que nuestro Salario Emocional está directamente vinculado a cómo nos sentimos con nuestro trabajo, identificar cualquier factor ausente o bajo de Salario Emocional puede indicar las causas de desmotivación e insatisfacción en tu equipo. Utilizar el Salario Emocional como marco de diagnóstico puede facilitar conversaciones significativas y positivas con los miembros de tu equipo. Puedes demostrar a los miembros de tu equipo que el desarrollo de su carrera y su bienestar es una prioridad para ti, a nivel individual y de equipo.
Cómo integrar el Salario Emocional en tu liderazgo
Si queremos utilizar el Salario Emocional como marco de referencia, y modelo para crear una organización saludable e irresistible, hay que tener en cuenta estos 5 pilares:
Comunicación y Transparencia: Toda persona involucrada debe de ser informada de lo que es el Salario Emocional y su propósito.
Medición: Es necesario medir el desarrollo del Salario Emocional en el tiempo. Y compararlo con otros KPIS importantes para la empresa. Para poder ver el impacto en el negocio que tiene integrar el Salario Emocional como parte central de la Responsabilidad Social Empresarial
Liderazgo: Necesitamos adoptar e integrar los diez factores que se destilan del BSE en nuestro estilo de liderazgo, en nuestros comportamientos y competencias deseados.
Continuidad: El proceso tiene que tener una proyección en el tiempo. Tanto en la integración de liderazgo, en su formación y capacitación, medición y ejecución, con una implicación continua.
Responsabilidad: El Salario Emocional es una Responsabilidad Compartida para Beneficio de la Persona, del Líder y de la Organización.
La buena noticia es que puedes empezar a marcar una diferencia real en el Salario Emocional de tu equipo sin tener que destinar un gran presupuesto a ello. ¿Por qué no empiezas con una pequeña acción a la semana y ves el impacto que tiene en el Salario Emocional de tu equipo?
