A continuación, te compartimos algunos de sus consejos para construir lugares de trabajo inclusivos.
1. Ver personas, no solo trabajadores
Pensar que las identidades dentro y fuera del lugar del trabajo están separadas es una de las tendencias, o mejor dicho creencias, que deben erradicarse de las organizaciones. Especialmente en aquellas que pretenden crear una cultura de diversidad realmente consistente.
Lamentablemente, aún existen brechas en la práctica diaria entre lo que se dice y se hace.
Cuando los líderes se toman el tiempo de ver a sus trabajadores más allá de su CV o cargo, están logrando que cada uno de ellos o ellas se sientan valorados como personas.
Consejo: Haz preguntas, muestra interés y apoyo por las identidades personales. Investiga qué días festivos, religiosos y culturales son importantes para los trabajadores/as de diferentes orígenes, y ofrece tiempo libre si es posible.
2. Liderar a través de la tensión
Es importante recordar que el trabajo de RRHH no existe separado del mundo y todo lo que ocurre a nivel global afecta a los trabajadores/as. Cualquier tema que surja sobre raza, género, religión, sexualidad u otros relacionados con la identidad.
Es importante que los líderes de Recursos Humanos asesoren a los Gerentes acerca de los temas que aparezcan sobre raza, género, religión, sexualidad u otros relacionados con la identidad, para que sean comunicados a sus equipos, por medio de realización de una declaración formal de la empresa y/o creación de un espacio seguro para mantener conversaciones o solicitar apoyo.
Consejo: Si dentro de tu país ocurren eventos importantes dirigidos a comunidades específicas, reúne a tu equipo y hazle saber que reconoces el impacto. Pregunta si alguien necesita tiempo libre y recuérdale que tienes una política de puertas abiertas en caso de que necesite hablar.
3. Usa tu poder para nivelar la cancha
Las personas buscan primero ver en sus líderes las conductas para implementar la norma. Los gerentes deben cultivar un comportamiento inclusivo para sus equipos.
Aquí algunos ejemplos de cómo hacerlo:
- Impide el lenguaje o comportamiento dañino en el momento que se produzca. Esto incluye anotar los tuyos, ya que todos tenemos prejuicios.
- Escucha y amplifica las preocupaciones de personas subrepresentadas.
- Da crédito a quien se lo merece; a las personas que realmente hicieron el trabajo.
- Delega el trabajo de manera equitativa y cuidadosa: Da a todos la oportunidad de brillar.
- Cuestiona las normas establecidas que implícitamente se dan por y para grupos privilegiados.
Tres preguntas que +REDRH te sugiere realizar por medio de una encuesta anónima.
- ¿Sientes que tu equipo es inclusivo? (integra a las personas sin importar sus diferencias)
- ¿Crees que en tu empresa se valora a las personas con ideas y puntos de vista diferentes?
- ¿Puedes ir a trabajar sin sentir la necesidad de ocultar parte de lo que eres?